Todos tenemos películas para diferentes momentos. En definitiva también tenemos algunas películas que nos llegan con facilidad, ya sea porque la historia tiene relación con nosotros o por algún otro motivo. Así es como llegamos a una de esos films para mí: Big Fish. Hay dos temas que me llegan de esta historia: la relación de Will con su padre y cómo conoce Edward a su esposa. Pero vayamos por partes.
Big Fish es la adaptación cinematográfica de la novela "Big Fish: A Novel of Mythic Proportions", por Daniel Wallace. Fue estrenada el 2003 y dirigida por Tim Burton. Esta es una película especial para el director, porque su padre murió el 2000 y un mes antes de empezar con Big Fish, su madre también falleció. Ese sentido gótico muy común en Tim Burton es remplazado por una mezcla de melancolía y fantasía. Fuera están los colores más oscuros y es bienvenida una paleta de colores más contrastada, en particular en las escenas de las historias.
La trama tiene dos protagonistas, pero varios narradores. Podríamos decir que Will Bloom (Billy Cudrup) es el personaje que hace avanzar la historia. Will dejó de hablar con su padre, conocido por contar historias fantásticas y tal vez inventadas, luego de que este hiciera una de sus gracias en su noche de bodas. Tres años pasan hasta que decide volver a Estados Unidos desde Francia con su esposa para tratar de reencontrarse con su papá. Edward Bloom (Albert Finney) está pasando por sus últimas etapas de cáncer. Will quiere aprovechar este poco tiempo restante para tratar de conocer al hombre detrás del mito. Desde este punto pasaremos por la vida de Edward Bloom (Ewan McGregor) y sus aventuras. Existe la posibilidad que lo que cuenta su padre esté algo exagerado, sin embargo, también contiene algo de verdad.
La trama va cambiando desde los periodos de fantasía a la realidad. Los primeros tiene un coloreado particular que los hace ver aún más fantásticos, mientras que las escenas en la vida real tiene generalmente tonos oscuros y mucha sombra. Edward pasa por varias etapas y conoce variados personajes que cambian su vida (él también cambia otras). Existen bellos momentos como su paso por Specter la primera vez o una de las escenas que siempre me golpe el corazón: la del circo. No solo esta escena esta bien desarrollada, sino que mezcla la fantasía con la realidad para mostrar de una forma exagerada lo que siente una persona cuando se enamora. No tengo problemas en decir que siento algo parecido a lo que describe Edward cuando he conocido a una chica que me roba el corazón. También hay que decir que hay unas frases que podrían derretir a cualquiera como: "tengo toda mi vida para conocerte". Sí, soy un tipo sentimental. A veces.
La relación de Will con su padre es conflictiva. Edward es un viejo que no entiende razón y pertenece a una generación diferente a Will. Esto es algo con lo que varios podemos identificarnos, sobre todo si nuestro padre es un poco "especial". A pesar de ello, la conclusión entre estos dos es muy bella y sientes que Will logró su cometido al final.
La música, como siempre con Tim Burton, está compuesta por Danny Elfman. La combinación de estos dos divide a algunas personas, sin embargo, creo que Elfman se tranquiliza un poco en Big Fish y entrega una banda sonora melancólica, sin tanta orquesta rimbombante. La cinematografía es potente en las historias de Edward, que es donde se puede jugar más. Hay algunas partes donde la película no ha envejecido muy bien, pero cuando hay un set de por medio o locación, se ve genial. La escena de los narcisos es un buen ejemplo de una toma que se mantiene en el tiempo. Y de pasada es terriblemente romántica, a qué no.
Creo que Big Fish es la película más accesible de Tim Burton y a la vez una dramática y muy real experiencia de padres e hijos distanciados. El cast es fabuloso (mención especial a Alison Lohman que en esta película parece un ángel). También es un film que juega con el concepto del mito de las historias, no obstante, de una forma aterrizada. Es una bella película que nos da una mano a entender las diferencias que podríamos tener con nuestra familia y también una mirada a nosotros mismos.
Big Fish es la adaptación cinematográfica de la novela "Big Fish: A Novel of Mythic Proportions", por Daniel Wallace. Fue estrenada el 2003 y dirigida por Tim Burton. Esta es una película especial para el director, porque su padre murió el 2000 y un mes antes de empezar con Big Fish, su madre también falleció. Ese sentido gótico muy común en Tim Burton es remplazado por una mezcla de melancolía y fantasía. Fuera están los colores más oscuros y es bienvenida una paleta de colores más contrastada, en particular en las escenas de las historias.
La trama tiene dos protagonistas, pero varios narradores. Podríamos decir que Will Bloom (Billy Cudrup) es el personaje que hace avanzar la historia. Will dejó de hablar con su padre, conocido por contar historias fantásticas y tal vez inventadas, luego de que este hiciera una de sus gracias en su noche de bodas. Tres años pasan hasta que decide volver a Estados Unidos desde Francia con su esposa para tratar de reencontrarse con su papá. Edward Bloom (Albert Finney) está pasando por sus últimas etapas de cáncer. Will quiere aprovechar este poco tiempo restante para tratar de conocer al hombre detrás del mito. Desde este punto pasaremos por la vida de Edward Bloom (Ewan McGregor) y sus aventuras. Existe la posibilidad que lo que cuenta su padre esté algo exagerado, sin embargo, también contiene algo de verdad.
La trama va cambiando desde los periodos de fantasía a la realidad. Los primeros tiene un coloreado particular que los hace ver aún más fantásticos, mientras que las escenas en la vida real tiene generalmente tonos oscuros y mucha sombra. Edward pasa por varias etapas y conoce variados personajes que cambian su vida (él también cambia otras). Existen bellos momentos como su paso por Specter la primera vez o una de las escenas que siempre me golpe el corazón: la del circo. No solo esta escena esta bien desarrollada, sino que mezcla la fantasía con la realidad para mostrar de una forma exagerada lo que siente una persona cuando se enamora. No tengo problemas en decir que siento algo parecido a lo que describe Edward cuando he conocido a una chica que me roba el corazón. También hay que decir que hay unas frases que podrían derretir a cualquiera como: "tengo toda mi vida para conocerte". Sí, soy un tipo sentimental. A veces.
La relación de Will con su padre es conflictiva. Edward es un viejo que no entiende razón y pertenece a una generación diferente a Will. Esto es algo con lo que varios podemos identificarnos, sobre todo si nuestro padre es un poco "especial". A pesar de ello, la conclusión entre estos dos es muy bella y sientes que Will logró su cometido al final.
La música, como siempre con Tim Burton, está compuesta por Danny Elfman. La combinación de estos dos divide a algunas personas, sin embargo, creo que Elfman se tranquiliza un poco en Big Fish y entrega una banda sonora melancólica, sin tanta orquesta rimbombante. La cinematografía es potente en las historias de Edward, que es donde se puede jugar más. Hay algunas partes donde la película no ha envejecido muy bien, pero cuando hay un set de por medio o locación, se ve genial. La escena de los narcisos es un buen ejemplo de una toma que se mantiene en el tiempo. Y de pasada es terriblemente romántica, a qué no.
Creo que Big Fish es la película más accesible de Tim Burton y a la vez una dramática y muy real experiencia de padres e hijos distanciados. El cast es fabuloso (mención especial a Alison Lohman que en esta película parece un ángel). También es un film que juega con el concepto del mito de las historias, no obstante, de una forma aterrizada. Es una bella película que nos da una mano a entender las diferencias que podríamos tener con nuestra familia y también una mirada a nosotros mismos.
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